
Conoce
Nuestra Historia
Finca el Empecinado fue fundada en 2017 por el Dr. Rubén Roa Dueñas y el enólogo Jesús Rivera en el corazón del Valle de Guadalupe, con la visión de crear un viñedo boutique enfocado en vinos de alta calidad a través de la recuperación de dos hectáreas de uva palomino de temporal de más de 50 años.
La Inspiración
La historia que inspiró este proyecto inicia en el encantador y pintoresco pueblo español llamado Roa, enclavado en la exuberante y mágica región de la Ribera del Duero. En este rincón de España, la tradición, el encanto y la pasión por el vino se entrelazan para crear un ambiente único y cautivador.
Un día soleado y radiante, mientras recorría las estrechas calles empedradas, mis ojos se posaron en una majestuosa estatua que se alzaba con orgullo en la plaza principal del pueblo. Este valiente personaje era el héroe legendario de la comarca, conocido como El Empecinado. La estatua transmitía un sentido de libertad, tenacidad y coraje que me dejó profundamente conmovido, como un relato fascinante de lucha contra la opresión y la voluntad inquebrantable de perseguir los sueños más sublimes.
La atmósfera mágica del pueblo de Roa y la inspiradora figura de El Empecinado despertaron algo muy especial en mí. A medida que aprendía más sobre la región y su rica tradición vitivinícola, una idea empezó a germinar en mi mente. Me identifiqué como un eslabón entre el pasado y el futuro de esta tierra tan bendita por la naturaleza, que me concedió un propósito claro: crear algo extraordinario, una vinícola que honre la historia y el legado de este personaje.
El sueño toma forma
Convencido de que el vino era la esencia misma de la Ribera del Duero, me propuse llevar esa esencia a un nuevo nivel en el valle de Guadalupe. Un lugar donde la tradición y la innovación se fundieran en armonía, y cada botella de vino contara una historia única y cautivadora.
Así, con el apoyo de mi padre, me embarqué en la emocionante aventura de construir una vinícola en el Valle de Guadalupe, en Baja California. El tiempo pasó y el sueño tomó forma: viñedos antiguos, de temporal rescatados, plantas ondulantes, en armonía con nuevas plantas recién traídas de Francia, una bodega con un diseño funcional y moderno, un equipo de expertos enológicos
y apasionados trabajando juntos para crear vinos excepcionales. Cada vino lleva consigo un pedazo de la leyenda de El Empecinado, la esencia misma del alma de la Ribera del Duero y un gusto por la fruta dulce y golosa del nuevo mundo.
Se escribe nuestra historia
En muy poco tiempo, nuestros vinos se ganaron un lugar destacado en la escena internacional del vino, siendo nuestro primogénito, El Cenzontle el vino aclamado por expertos y apasionados por igual, particularmente en el Concurso Mundial de Bruselas 2023. Cada cosecha es una celebración de la perseverancia, la dedicación y el amor por la tierra y la uva que les da vida.
Mientras el sol se pone sobre los viñedos dorados y los campos se bañan con los colores del atardecer, es que me siento agradecido por aquella visita al pueblo de Roa, cuando la figura imponente de El Empecinado me inspiró a perseguir mis sueños con valentía y pasión. Nuestro trabajo, es un tributo vivo a la esencia misma de aquella experiencia, a la tierra de Baja California, expresado como un legado de amor y respeto por el vino y la tierra que nos vio nacer.